Vinoble o "Vi no-noble" Jerez 2022.

Despues de cuatro largos años Vinoble volvió a Jerez, o mejor dicho, Jerez volvió a Vinoble. Jerez, y Sanlúcar, y El Puerto de Santa María, y Chiclana y...media Andalucía. La buena noticia, la buenísima, es que hubo Vinoble 2022; la regular es que no cabe duda que cuesta muchísimo volver a los números de 2004, en adelante.

Digo 2004, porque creo que fue mi primera experiencia en este salón, porque entonces así se llamaba, y todavía guardo aquel inmenso catálogo que ponía "Salón Internacional de Vinos Nobles. Generosos, licorosos, y Dulces Especiales.

Y entonces te ibas al stand de una bodega de Sicilia, y probabas un passito di Pantelleria buenísimo, luego te ibas a Austria y probabas un Eiswein, o unos vinos húngaros con esa podredumbre noble, sí, hasta la podredumbre se le llamaba 'noble', la Botrytis cinerea, ese hongo cachondo que hace que las uvas parezcan podridas - y lo están - pero con las que se hacen unos vinos dulces esquisitos, como el Tokaji Aszú.

Una edición con muchísima menos presencia internacional; eché de menos a Vinos Perea, una empresa de distribución de vinos internacionales, que no solía faltar a la cita, y traía lo mejor de cada casa, y vino a sustituirlo, entre comillas, Meddis, pero Meddis se lo trajo todo, un totum revolutum que me hizo imposible hacer alguna cata más o menos dirigida, con demasiados vinos, todos mezclados en los enfriadores, muchos vinos tranquilos: vinos blancos, tintos y rosados tranquilos que antaño no tenían cabida en Vinoble. Mucho Vi no-noble.

Lo que sí hubo. Una magnífica representación de Vinos de Andalucía, Condado de Huelva, con Bodegas Sauci y Marqués de Villalba, el Naranja de Sauci es una pasada; Málaga - buenísimos los vinos de Mollina, de Cortijo La Fuente, la única bodega de Málaga que trabaja la PX con crianza biológica, un magistral Don Pepe. Los vinos de la Axarquía malagueña de Bodegas Bentomiz, con sus famosos Ariyanas, Moscatel "Naturalmente Dulce", los Alvear, Pérez Barquero, La Inglesa, Toro Albalá...de Córdoba, de Montilla, mucha Montilla y mucho Moriles. Y mucho Cádiz.

El Oloroso Excepcional de Bodegas Fernando de Castilla, y el Amontillado S. Roberto, de Bodegas Barbadillo son dos ejemplos de lo que el tiempo - mucho tiempo - puede hacer con los vinos de Jerez. Ochenta, noventa, cien años...no se sabe, qué mas da. Vinos concentrados, extremos, imprevisibles.

Eso sí, gracias al stand de Meddis pude dedicarle algo de tiempo a los Riesling y a algún que otro Gewurztraminer; andaba yo buscando los Grains Nobles, los Vendanges Tardives, de Alsacia o los Beerenauslese y Trockenbeerenauslese, de Alemania, pero la mayoría eran secos. Eso sí, me topé con un Late Harvest Rosado, que resultó de ser de Moldavia, y elaborado con Cabernet Sauvignon. Sorprendente y muy rico este Chateau Cristi Cabernet Sauvignon Late Harvest, de Chateau Cristi, una bodega histórica, de la Moldavia de la época de los Zares y Miguel Strogoff.

Junto a ellos una etiqueta que me llamó mucho la atención por su colorido. Un vino de Sudáfrica elaborado con Chenin Blanc a partir de uvas secadas al aire tras la vendimia para aumentar el nivel de azúcar, un straw wine o vin de paille, vino de paja, por las alfombrillas de paja donde quedan expuestas las uvas, algo bastante común aunque escaso en Alsacia y en el Jura, donde son famosos los vins de paille de Arbois o Cote du Jura.

De la zona de Stellenbosch, este de Trafford Straw Wine pasa  - tras el secado y la fermentación - por unos dos años de crianza en barricas de roble francés, producción que, de limitada pasa a casi ridícula (unas 800 minibotellas de 0,375). Es el primer vino de este tipo que se elabora en Sudáfrica, donde esta bodega de Trafford Wines lo viene elaborando hace unos 10 años. Curiosísimo y riquísimo: mieles, orejones, frutos secos, especias de la madera, buenísima acidez...Me hubiera gustado traerme la botella vacía para guardar su etiqueta, una pareja de nativas en amistosa y colorida pintura.

Finalmente vuelvo a Jerez, al stand de Bodegas Valdespino donde me comentan hay una interesante novedad: Manzanilla La Especial, y una nueva gama de vinos de La Guita que ya incluye además de su conocida manzanilla y manzanilla en Rama, la nueva Manzanilla Pasada La Guita y el Amontillado La Guita.
Manzanilla La Especial, a partir de mostos del Pago de Miraflores, en Sanlúcar de Barrameda, y embotellada en Rama, recuperando una antigua marca de la bodega.

Foto de familia, de la familia La Guita, donde destacan las dos novedades reseñadas: Manzanilla Pasada La Guita, una selección de botas de la solera de La Guita, y el Amontillado La Guita, un soberbio amontillado sanluqueño, con más de 15 años de crianza mixta (biológica más oxidativa), ambos criados en el casco de bodega de la calle Misericordia, en el barrio Alto.

Hubo más, por supuesto, mucho más, pero lo que más había, en un Salón de Vinos Nobles, eran muchas personas nobles , amigos, viejos y nuevos, que vienen especialmente a Jerez. A Vinoble. Aunque hayan pasado cuatro años. 

Hasta 2024!!!!